El plan de trabajo ha de incluir todo lo que hace referencia a una buena planificación y estructuración del tiempo real que se va a dedicar al estudio, teniendo en cuenta el número de materias y su dificultad.
Conceptos como el de tiempo teórico, libre y real, así como la valoración de las actividades extraescolares que se realizan diariamente o bien otras a las que el sujeto dedica unas horas semanales, deben ser revisados y analizados para planificar con garantías de éxito el calendario de estudio: semanal, quincenal, mensual o trimestral.
Es muy importante que el alumno no deje el estudio para el día antes del examen, ya que eso hará que estudie de forma superficial, sin tiempo para comprender bien los conceptos y memorizando más que entendiendo la materia. El problema de estudiar el último día es relacionar los conceptos de forma confusa, sin suficiente tiempo para hacer esquemas y/o mapas conceptuales que ayuden al estudio.
Si se distribuye bien el tiempo, el día antes no tendrá la presión y nervios del examen por no saber todo el temario, sino que puede ser un momento para repasar aquello que más le cuesta entender, relajarse, o incluso, puede distribuirse el tiempo de repaso haciendo más pausas durante la lectura del temario. El día antes debería ser un momento tranquilo y de repaso.
Por supuesto, si dedica más tiempo de estudio el último día, necesitará estudiar sin hacer breves pausas entre horas y lo único que obtendrá es estar saturado de información. Tampoco es bueno estar estudiando hasta la madrugada, porque eso hace que duerma menos horas y no esté suficientemente descansado para contestar a las preguntas, pensar, etc. Como decíamos en el apartado de en plena forma, el descanso es fundamental.
En resumen, es mejor estudiar con bastante previsión, y no esperar a última hora para leer todo el temario. Lo importante es entender lo que se estudia y estar tranquilos las horas antes al examen, por eso es interesante el apartado en el que se explica que hacer justo antes del examen.
Conceptos como el de tiempo teórico, libre y real, así como la valoración de las actividades extraescolares que se realizan diariamente o bien otras a las que el sujeto dedica unas horas semanales, deben ser revisados y analizados para planificar con garantías de éxito el calendario de estudio: semanal, quincenal, mensual o trimestral.
Recomendaciones para elaborar un método de estudio: |
1. Organizar el material de trabajo 2. Realizar una distribución flexible del tiempo 3. Tener presentes las dificultades de la materia a trabajar 4. Averiguar el ritmo personal de trabajo 5. Realizar una valoración de la compresión, memorización.... 6. Empezar por las tareas más difíciles y complicadas 7. Memorizar datos, comprenderlos y asimilarlos
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Las pautas para el estudio de una lección pueden concretarse en: |
1. Prelectura: lectura de aproximación.
4. Subrayado
7. Memorización |
Es muy importante que el alumno no deje el estudio para el día antes del examen, ya que eso hará que estudie de forma superficial, sin tiempo para comprender bien los conceptos y memorizando más que entendiendo la materia. El problema de estudiar el último día es relacionar los conceptos de forma confusa, sin suficiente tiempo para hacer esquemas y/o mapas conceptuales que ayuden al estudio.
Si se distribuye bien el tiempo, el día antes no tendrá la presión y nervios del examen por no saber todo el temario, sino que puede ser un momento para repasar aquello que más le cuesta entender, relajarse, o incluso, puede distribuirse el tiempo de repaso haciendo más pausas durante la lectura del temario. El día antes debería ser un momento tranquilo y de repaso.
Por supuesto, si dedica más tiempo de estudio el último día, necesitará estudiar sin hacer breves pausas entre horas y lo único que obtendrá es estar saturado de información. Tampoco es bueno estar estudiando hasta la madrugada, porque eso hace que duerma menos horas y no esté suficientemente descansado para contestar a las preguntas, pensar, etc. Como decíamos en el apartado de en plena forma, el descanso es fundamental.
En resumen, es mejor estudiar con bastante previsión, y no esperar a última hora para leer todo el temario. Lo importante es entender lo que se estudia y estar tranquilos las horas antes al examen, por eso es interesante el apartado en el que se explica que hacer justo antes del examen.